Traducido por Pepe Latorre
Bienvenido al carro de los Baltimore Orioles. Otro arribista que llega. Me alegra que te hayas subido. Te estaba esperando.
El mundo del béisbol por fin se ha dado cuenta de que los Orioles son relevantes en 2022 (ocho victorias seguidas y ponerse a dos juegos del comodín). Yo, por mi parte, he estado disfrutando tranquilamente de la producción de un trío de relevistas de Baltimore durante toda la temporada.
Félix Bautista, con una recta de cuatro costuras que promedia 98.6 MPH y una splitter más de 10 millas más lenta, ha estado aportando ponches a varios de mis equipos de fantasía durante toda la temporada con una sólida tasa de 11.1 strikes cada nueve entradas. Ese splitter es lo realmente marca la diferencia: los bateadores están promediando .095 en su contra esta temporada. Recibí un aviso esta primavera de que Bautista lo había descubierto, y de hecho lo ha hecho, registrando una efectividad de 1.77 en 35 2/3 entradas.
Sin embargo, esa cifra es mediocre para los estándares del bullpen de los Orioles. Su efectividad es más alta que la del cerrador Jorge López (1.74) y que la de Cionel Pérez, quien registra, no sabemos cómo, 0.96.
Pero no seas demasiado duro contigo mismo por no ver venir a los Nasty Boys de Baltimore. Su mánager, Brandon Hyde, tampoco lo vio venir.
“Seré honesto, no tenía idea de cómo íbamos a ser en el montículo”, me dijo Hyde la semana pasada antes de una serie de cuatro juegos en la Baltimore barrió a los Angels. “Estaba muy nervioso, extremadamente nervioso, de cara a la temporada… No sabía lo que iba a hacer Cinel Pérez. No sabía que Bautista iba a lanzar strikes. No sabía cómo rendiría Lopi (el apodo de Hyde para López) en la parte final de un juego. Ha sido una sorpresa muy agradable”.
¡Ha sido agradable, Brandon! Pero también presenta consecuencias colaterales para los entrenadores de las ligas de fantasía con peloteros de los Orioles y, supongo, también para Hyde.
Tomemos como ejemplo el juego del jueves pasado por la noche contra los Angels. Jordan Lyles había lanzado seis buenas entradas, pero ya llevaba 104 lanzamientos y Hyde no quería presionarlo más. Después de una séptima entrada completada por Joey Krehbiel y su “irregular” efectividad de 2.35 (supongo que otros relevistas de Baltimore se burlan de él constantemente en el bullpen), Hyde tenía que conseguir seis outs y tenía por delante una octava entrada en la que Mike Trout y Shohei Ohtani eran los dos primeros bateadores programados.
En aquel momento me pregunté varias cosas: ¿El orden jerárquico establecido por Hyde seguirá siendo el mismo y continuaría usando su relevista más valioso en la novena? ¿Y a quién considera ese relevista?
En López, un hombre de 29 años que ha viajado mucho y que ahora está en su tercer equipo, Hyde ha puesto claramente un letrero que dice cerrador. Así que le tocó a Pérez sacar esos outs en la octava entrada, y lo hizo, por cierto, de manera bastante espectacular. Luego salió López a cerrar. Ganaron los Orioles, como vienen haciendo estos días.
“Bueno, López iba a estar una entrada como máximo, realmente no quería siquiera usarlo esta noche”, dijo Hyde sobre sus decisiones. “Su carga de trabajo ha sido muy pesada. Pero TC, su carga de trabajo ha sido extremadamente pesada, por lo que iba a estar fuera esa noche. Lopi solo estaba disponible para una situación de salvamento en la novena entrada. Tengo mucha confianza en Cionel Pérez para sacar tanto a bateadores diestros como zurdos y no me importa usarlo en una secuencia en la que vea derecho-izquierdo-derecho. Normalmente no hago eso, pero confío en las cosas. Y sí, es bueno tener opciones distintas cuando algunos muchachos están cansados”.
Analicemos esto, ¿de acuerdo? López está teniendo oportunidades de salvamento, punto. Ha acumulado 16 mientras que ningún otro relevista de los Orioles tiene más de dos. Pero Hyde también tiene razón al confiar en Pérez en una entrada que tiene a dos derechos, ya que su OPS contra los derechos es un buen .652, solo un poco superior que su .519 contra zurdos.
¿Por qué importa esto? Así lo sintetizaba Nathan Ruiz en un tweet:
Las cosas de Mike Elias:
-Su lista para la primera elección del draft sigue teniendo unos cinco nombres. No reveló mucho al respecto, aparte de que no hay lanzadores.
– Los espasmos en la espalda de Coby Mayo lo pondrán en la lista de lesionados de los Bowie Baysox.
– Abordarán la fecha límite comercial desde una “perspectiva global” de la organización.
Una perspectiva global significa una cosa para un brazo pre-arbitraje como Pérez o un novato como Bautista, y otra muy distinta para López, firmado hasta finales del 2022. Con su buena racha, los Orioles mostraron lo difícil que es hacerle daño a su cerrador. Es algo que seguirá sucediendo si juegan así de bien durante las próximas tres semanas. Pero la otra cara de la moneda aquí es que Hyde tiene otras opciones para la novena si Baltimore recibe la oferta correcta de otro contendiente por López, quien debería atraer mucho interés.
Tanto Pérez como Bautista están más que disponibles en las ligas de Yahoo y ESPN. Ya han estado ayudando a mis equipos, en parte porque la mayoría de mis ligas tienen los holds como categoría. Pero existe una oportunidad real de que uno u otro acabe convertido en el cerrador de Baltimore, y Hyde suena como un gerente que se siente cómodo usando a cualquiera de los dos en situaciones de mucho apalancamiento. Teniendo en cuenta que los Orioles tienen la segunda mejor defensa en la MLB por carreras defensivas salvadas, no te arrepentirás.
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