Traducido por Pepe Latorre
Cada mes de abril nos encontramos con un sinfín de sorpresas. Esta es una en la que he estado pensando mucho: Brent Rooker es uno de los cinco mejores bateadores del béisbol.
Rooker actualmente posee una línea de .333/.451/.727. Tiene ocho jonrones en 82 apariciones en el plato. Tiene casi tantas bases por bolas como ponches.
“Pero espera”, dices, “¿seguramente las métricas avanzadas mostrarán que todo esto es un espejismo?” No: Rooker tiene el segundo mejor DRC+ de la MLB, 145. Incluso si quisieras hacer una regresión y ver su DRC estimado más bajo nos encontramos con que sigue siendo 116.
Statcast nos da la razón. Rooker lidera la liga en xwOBA, está en el percentil 95 en promedio de bateo esperado, en el 98 en porcentaje de barriles y en el 99 en porcentaje de slugging esperado. En algunos aspectos, Rooker ni siquiera está haciendo nada que no haya hecho antes. Ha golpeado la pelota más fuerte que su velocidad de salida máxima actual de 110.5 mph en múltiples ocasiones. Solo ha tenido 352 apariciones en el plato en su carrera en las Mayores y alrededor de una cuarta parte de ellas han sido esta temporada.
El problema, por supuesto, es que Rooker tiene 28 años y era considerado un jugador de Grandes Ligas del montón. De hecho, los Royals se deshicieron de él en la temporada baja. No es de extrañar que un equipo como los A’s lo eligiera, ya que “los peloteros del montón” han sido la norma de la franquicia durante la mayor parte de este siglo. En cambio, Rooker está bateando como un MVP.
Cualquiera en el béisbol puede tener un mes caliente, pero estamos empezando a pasar de tener un par de semanas buenas a “¿debemos creer en esto?”. Muchas personas habrán elegido a Rooker solo porque está en racha, listos para dejarlo libre en cuanto la racha se enfríe. ¿Y si es más que eso?
El poder, como se señaló anteriormente, es legítimo. La velocidad máxima de salida de la carrera de Rooker es de 112.2 mph. Incluso en su primer tiempo de juego en las Mayores, en 2021, cuando la producción fue decepcionante en general, acumuló nueve bambinazos en poco más de 200 viajes al plato y tuvo un xSLG de .463.
El de 28 años también destrozó la bola en las Menores. Su OPS superó los .900 en todas menos una de sus campañas. En su tiempo en Mississippi State, antes de ser drafteado, fue imparable. Registró un monstruoso OPS de 1.306 en su camino hacia ganar la segunda Triple Corona en la historia de la SEC junto con el premio al Jugador del Año.
En otras palabras, Rooker siempre ha bateado, que es exactamente lo que dijo Jeffrey Paternostro cuando Rooker hizo su última aparición en la lista de prospectos de los Twins. En ese momento se destacaron algunas preocupaciones en cuanto a sus swings y fallos, especialmente con lanzamientos quebrados, pero se dijo que tenía potencial para ser un bate de .250 y 30 jonrones. Los problemas de abanicos ciertamente quedaron enmascarados por su desempeño ofensivo en las Menores, donde había mantenido una gran producción a pesar de poncharse alrededor, si no más, del 30% del tiempo. Esta tendencia continuó en las Mayores en 2021 y sin la tasa de boletos proporcional, así que los Twins, que apenas tenían jardineros, lo incluyeron en el traspaso por Chris Paddack con los Padres en la primavera siguiente.
Rooker no tuvo muchas oportunidades de mostrar ninguna mejora el año pasado. Solo dispuso de 36 apariciones en el plato, la mayoría de ellas con los Royals después de un canje en la fecha límite. La tasa de ponches persistió, por lo que la marca de menos del 20% de este año es un cambio gigantesco.
El tema es que Rooker no está incurriendo en menos swing y fallos. De hecho, lo está haciendo más que nunca en las Mayores. Su tasa de contacto ha bajado al 65%. Su tasa de swing y strikes es un monstruoso 16.5%. Solo hace contacto en el 71,7% de los lanzamientos en la zona.
Una cosa en la que Rooker si ha mejorado es qué lanzamientos busca. Compare sus tasas de swings dentro de la zona y swings fuera de la zona desde su temporada 2021 hasta ahora:
| Año | Swings dentro de la zona | Swings fuera de la zona | Diferencia |
| 2021 | 34.2% | 68.5% | 34.3% |
| 2023 | 27.4% | 74.1% | 46.7% |
Esa es una diferencia bastante grande y explica mucho de cómo Rooker todavía está causando tanto daño. Es mucho más probable que lo que está golpeando sea golpeable que lo que golpeó en el pasado, y aunque todavía falla mucho en hacer contacto, se está dando a sí mismo una oportunidad mucho mejor de poner en juego ese poder adicional. No olviden que ya andaba a ritmo de 25-30 jonrones en el 2021 con un mal enfoque. No debería ser una sorpresa verlo mejorar en eso si puede mantener una parte decente de esta ganancia.
Otra cosa que actualmente funciona para Rooker es un nivel extremadamente alto de agresividad con dos strikes. Cuando se poncha, lo hace con swing, con 15 de sus 16 strikes produciéndose después de abanicar. Esto se debe en parte a que ha hecho swing al 62% de los lanzamientos de dos strikes, frente al 58% en esa temporada 2021, y le está funcionando. Una cuarta parte de esos swings han resultado en una pelota en juego; esa marca estaba por debajo del 15% en 2021. Todavía tiene un OPS de .876 con dos strikes y 1.023 con el lanzador adelante en la cuenta. Registros lo suficientemente buenos como para un increíble 241 y 291 de sOPS+, respectivamente. Rooker ataca con dos strikes, y hasta ahora está seleccionando suficientes lanzamientos con los que puede hacer contacto como para que su técnica funcione.
El problema con esto es que, a pesar de toda su mejor selección, Rooker todavía no tiene el swing para hacer un contacto suficiente que mantenga esa tasa de ponches o el enfoque de dos strikes en una muestra más grande. Los ponches aumentarán cuando no esté logrando poner el barril en la pelota a un ritmo tan prodigioso, y el índice de contacto actual sugiere que podría volver al punto de convertirse en una verdadera carga.
Dicho esto, estamos hablando de los A’s de 2023, y si Rooker batea .220 pero es una amenaza que aspira a los 35 bambinazos, la lista de opciones ofensivas alternativas con esa ventaja no es larga, sobre todo si Ramón Laureano o Seth Brown salen traspasados a la primera oportunidad (suponiendo que no aprovechen el buen comienzo de Rooker para traspasarlo también). Tiene un pelotón inverso bastante significativo, tanto esta temporada como a lo largo de su carrera, por lo que no debería haber riesgo de ser la parte menos habitual de un pelotón a pesar de ser zurdo. Si mantiene la tasa baja de swings fuera de la zona existe una gran posibilidad de que también mantenga la tasa de boletos en los dos dígitos, aumentando su valor en las ligas con OBP.
A modo de resumen, Rooker es lo que la gente pensó que podría ser como prospecto: jardinero machacón con potencial para conectar más de 30 cuadrangulares. Este tipo de tasa de contacto no es prohibitivo; Adolis García, Teoscar Hernández y Patrick Wisdom se encuentran entre los que lograron que funcionara el año pasado. Sin embargo, el promedio de Wisdom (.207) muestra la desventaja que este tipo de perfil puede traer en ese departamento. Estate preparado para la posibilidad de que su promedio baje, pero si necesitas poder, confío en que Rooker continuará proporcionándolo.
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