keyboard_arrow_uptop
Image credit: Nick Turchiaro - USA TODAY Sports

Traducido por Pepe Latorre

Chaim Bloom, nuevo Jefe de Operaciones Beisbolísticas de los Boston Red Sox, está en el ojo del huracán. Se le ha encargado la poco envidiable tarea de mejorar el rendimiento del equipo al tiempo que reduce los salarios y los deja por debajo de los 210 millones que suponen pagar el impuesto de lujo. Una de las soluciones que han dado los medios locales ha sido la de traspasar al lanzador David Price, al que aún le quedan tres años y 96 millones pendientes de ese contrato de siete años y 210 millones que firmó en 2016.

Price ha estado gris en 2019. Y eso que el año anterior fue uno de los héroes de la postemporada de los Red Sox. Una de las piezas claves del equipo que se llevó la Serie Mundial. ¡Jugar en Boston nunca ha sido fácil! Los medios y los aficionados más fieles están dispuestos a prescindir de Price a pesar de que hace solo un año que el lanzador decidió no salirse de su contrato. Tampoco se ahorraría tanto dinero con su salida. Seguramente Boston tendría que asumir parte de su salario. ¿Por qué? Ya no vale 32 millones al año.

Dejemos de lado a los medios deportivos de Boston, a sus aficionados y a su corta memoria. Lo que nos interesa aquí es el valor de Price en las ligas de fantasía. No hace tanto era un as de los que podía llevar a tu equipo a la victoria. Ya no es ese lanzador, pero sigue siendo un top 40 en las ligas mixtas. ¿Seguro?

Según los estándares de valoración de lanzadores de Mike Gianella para ligas mixtas (15 equipos) Price terminó la temporada 2019 como el lanzador número 92, cifra que coincide con su puesto 93 del draft que tuvo en las ligas de NFBC. Pero debido a que solo logró lanzar 107 ⅓ entradas en 22 aperturas fue un lanzador con valor de 1 dólar en 2019. Esto seguro que está bastante lejos del top 40, pero si se profundiza un poco en las estadísticas vemos que la temporada de Price fue mucho mejor.

Las cosas no se torcieron hasta las últimas seis aperturas. Durante las 16 primeras Price tuvo una efectividad de 3.24 con un WHIP de 1.14 y 95 ponches en 83 ⅓ entradas. Estaba en el buen camino para finalizar el año en el top 40, incluso en el top 25. Desgraciadamente su ERA en esas últimas seis aperturas fue de 7.88. Permitió ocho cuadrangulares en sus últimas 24 entradas y fastidió sus estadísticas.

Los números periféricos de Price durante el 2019 fueron tan buenos, si no mejores, que los del 2018, cuando se cubrió de gloria con los Red Sox. Su porcentaje de boletos (7%) y de home runs (1.26 HR/9) fue prácticamente idéntico. Pero consiguió un 28% de ponches, la mejor marca de su carrera. Este aumento fue fruto de un incremento en su porcentaje de strikes por abanicado, que pasó del 9.6 al 11.2.

Sus índices de abanicos y contacto fueron prácticamente idénticos a los de años anteriores, mientras que su índice de strikes con el conteo 0-0 fue el segundo mejor de su carrera. Hubo pequeñas variaciones los resultados de sus lanzamientos bateados: menos elevadas, pero más líneas. Los contactos duros permitidos aumentaron hasta un 36.9%, máximo de su carrera, pero tuvo poco efecto en los cuadrangulares permitidos y no causó ninguna diferencia perceptible en su ERA y/o WHIP.

Price perdió menos de una milla por hora en su bola rápida: 92 mph en 2019, 92.7 en 2018 y 94.3 en 2017. El cambio más significativo de su repertorio fue una reducción drástica en el uso de la slider. Lanzó aproximadamente un tercio menos que en 2018, optando por lanzar más rectas y algunos cambios más. Volvió a lanzar alguna curva, pero al igual que en años anteriores fue un pitch marginal.

Price fue, a grandes rasgos, el mismo lanzador que ha sido en los últimos años. Ya no es el power pitcher que fue entre 2008 y 2017, pero se está adaptando bien. Está manejando la disminución en la velocidad con una mejor localización y haciendo que los bates no se sientan cómodos. Sus números del 2019 sugieren que Price aún tiene potencial para ser un pitcher sólido con un techo alto en las ligas de fantasía. Aunque es cierto que ya no es la estrella que fue durante la mayor parte de su carrera, pero es algo esperable en un jugador de 34 años que va a empezar su decimotercera temporada de Grandes Ligas.

El valor de Price en el béisbol de fantasía en 2020 dependerá de su salud y del riesgo que se esté dispuesto a asumir. De 2010 a 2016 Price fue un auténtico caballo que garantizó 200 entradas en todas menos una temporada (187 IP en 2013). De 2017 en adelante Price no ha sido confiable, solo ha llegado a las 30 aperturas en una de las últimas tres temporadas. Los números nos dicen que todavía es capaz de completar una temporada sólida, pero va a presentar un riesgo considerable debido a su historial de lesiones en los últimos tres años.

La percepción lo es todo en esta situación, y hay una potencial oportunidad para aprovechar la reciente subjetividad hacia Price en 2020. muchos gerentes de fantasía pasen de Price en el próximo draft debido a las lesiones que tanto han limitado sus entradas en las últimas tres temporadas. La pregunta es hasta qué punto el costo de Price caerá en el draft del 2020. Si su posición cae hasta el punto de que se puede reclutar a Price más allá de los 150 mejores jugadores en una liga de 15 equipos, hay una buena ganancia potencial para quien lo seleccione. Sin embargo, si se tiene que elegirlo entre los 100 mejores dejarle escapar sería una mejor idea.

Thank you for reading

This is a free article. If you enjoyed it, consider subscribing to Baseball Prospectus. Subscriptions support ongoing public baseball research and analysis in an increasingly proprietary environment.

Subscribe now
You need to be logged in to comment. Login or Subscribe