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Image credit: Jake Roth - USA TODAY Sports

Traducido por Marco Gámez

Se ha convertido en una tendencia para los lanzadores utilizar su mejor lanzamiento con más frecuencia, independientemente del tipo que éste sea. Estoy seguro de que, en realidad, este fenómeno ha existido prácticamente desde siempre, pero parece que el surgimiento y la disposición de Rich Hill de lanzar su bola curva más de la mitad del tiempo realmente encendieron una luz sobre una nueva forma de mezclar lanzamientos. Desde ese momento, equipos como los Astros han enfatizado la importancia de apoyarse en las armas más mortales de un lanzador, mientras que aparentemente arrojan los malos lanzamientos a la basura, maldita sea la variedad. Tiene todo el sentido del mundo: simplemente lanza más tus buenos lanzamientos y menos los malos. Es un poco como decir: “Wow, esta salsa es genial, ¿debería poner más en estos tacos o cambiarme a mayonesa por un poco más de variedad?” Quiero decir, más salsa. Cada vez.

Desafortunadamente, algunos lanzadores no pueden darse ese lujo, y las razones no siempre están bajo su control. Pittsburgh es un equipo conocido por tener una idea muy específica sobre sus mezclas de lanzamientos. Lo mismo ocurre con el antiguo régimen en Baltimore. Luego, llegamos a Coors Field. Desde hace tiempo se sabe que Coors es, uh, menos que ideal para aquellos que están en el montículo. A principios de esta temporada, J.P. Breen escribió acerca de sus efectos sobre Germán Márquez, y cómo la altitud no solo puede jugar trucos, en la vida real, sobre los lanzamientos, sino también en la mentalidad de los lanzadores, lo que lleva a mezclas de lanzamientos retorcidas. Lo mismo puede decirse sobre el compañero de rotación de Márquez, Jon Gray.

Desde que fue escogido con la tercera selección general en el draft de 2013, es difícil calificar el tiempo de Gray en Denver como un gran éxito. En 641 1/3 entradas con el equipo de grandes ligas, el derecho ha logrado una efectividad de 4.46 (4.29 DRA) y 1.33 WHIP, mientras dominó vía strikes a casi el 25% de los oponentes. Sin embargo, tanto J.P. como otros han mencionado, que el ambiente hogareño de Gray limita su capacidad para canalizar de manera efectiva sus dos mejores lanzamientos al grado de que, probablemente, le brindarían el mayor éxito. Gray tiene una potente bola curva que no ha permitido un promedio de bateo superior a la llamada Línea de Mendoza en toda su carrera. El slider de Gray fue su mejor ofrecimiento para generar abanicos en 2019, ubicándose como el 23º lanzamiento más abanicado para los lanzadores que usaron al menos 200 sliders (de un total de 111). Y si quisieras realmente enfocarte más para aumentar su importancia, fue el octavo mejor slider en el béisbol entre los lanzadores que lanzaron al menos 700 sliders. (Patrick Corbin lanzó más de 1,200 sliders la temporada pasada. No tengo más detalles sobre eso…son solo muchos sliders).

Además de que los lanzamientos quebrados de Gray son extremadamente buenos, su bola rápida no lo es. El jugador de 28 años puede lanzar una bola rápida hasta a 99 mph (159 kph), pero el lanzamiento tiene un giro relativamente bajo (inferior al 11%) y los bateadores oponentes se deleitan con este tipo de envío. Desde 2017, Gray se ha clasificado entre los 10 más altos en cuanto al promedio de bateo y al porcentaje de slugging contra su bola rápida, una lista que ciertamente es ignominiosa de por sí. No es que uno sea pesimista, pero probablemente sea una buena idea que Gray lance sus lanzamientos malos con menos frecuencia.

Entonces, si comenzamos con la idea de que Gray necesita lanzar más sliders, veamos más números para respaldar esta solicitud. En 2019, los oponentes batearon .183 contra este envío y solo alcanzaron .297 de slugging. Eso es mejor que los resultados de 2018 (.226/.389) pero no tan buenos como sus números de 2017 (.167/.242). La conclusión es que el slider de Gray es muy, muy bueno, y debe tirarlo tanto como sea posible. Sin embargo, y de nuevo, el problema es Coors Field y la capacidad del parque para reducir la efectividad de Gray con este tipo de envío.

Durante su carrera, Gray ha lanzado al menos 35% de sliders en 11 aperturas en casa. Aquí están los resultados:

6/27/16 TOR 7.0 IP 4 ER 0 BB 5 H 8 K
8/17/16 WSH 4.0 IP 4 ER 1 BB 6 H 3 K
9/2/17 ARI 5.0 IP 3 ER 3 BB 5 H 6 K
5/13/18 MIL 5.3 IP 6 ER 1 BB 6 H 10 K
5/30/18 SF 3.3 IP 4 ER 3 BB 6 H 5 K
7/14/18 SEA 7.3 IP 1 ER 1 BB 5 H 6 K
8/10/18 LAD 5.7 IP 4 ER 1 BB 8 H 4 K
9/7/18 LAD 4.0 IP 2 ER 5 BB 4 H 4 K
9/29/18 WSH 2.0 IP 5 ER 0 BB 7 H 1 K
7/12/19 CIN 7.0 IP 2 ER 0 BB 4 H 6 K
7/29/19 LAD 8.0 IP 1 ER 3 BB 3 H 6 K
58 2/3 IP 5.52 ERA 2.7 BB/9 1.31 WHIP 9.0 K/9

No es lo ideal. Realmente hace su mejor trabajo al limitar las bases por bolas en los juegos como local, pero la pelota todavía vuela en el delgado aire, por lo que el WHIP es bastante malo incluso con menos bases por bolas.

Gray ha utilizado el slider en al menos el 35% de sus lanzamientos 15 veces en la carretera:

6/5/16 @ SD 7.0 IP 2 ER 1 BB 5 H 12 K
6/17/16 @ MIA 6.0 IP 2 ER 2 BB 6 H 4 K
7/25/17 @ STL 5.0 IP 2 ER 0 BB 8 H 6 K
8/22/17 @ KC 6.7 IP 2 ER 1 BB 6 H 6 K
8/27/17 @ ATL 6.0 IP 0 ER 2 BB 5 H 7 K
3/29/18 @ ARI 4.0 IP 3 ER 3 BB 6 H 4 K
6/17/18 @ TEX 5.0 IP 6 ER 1 BB 6 H 9 K
7/31/18 @ STL 7.3 IP 2 ER 2 BB 4 H 5 K
8/5/18 @ MIL 8.0 IP 1 ER 2 BB 4 H 8 K
8/16/18 @ ATL 7.0 IP 3 ER 1 BB 5 H 9 K
5/17/19 @ PHI 4.7 IP 5 ER 3 BB 5 H 8 K
6/8/19 @ NYM 5.7 IP 4 ER 3 BB 8 H 8 K
6/19/19 @ ARI 6.0 IP 1 ER 2 BB 6 H 4 K
7/24/19 @ WAS 4.0 IP 1 ER 5 BB 2 H 4 K
8/8/19 @ SD 5.7 IP 3 ER 2 BB 6 H 4 K
88 IP 3.78 ERA 3.0 BB/9 1.27 WHIP 10.0 K/9

Gray dio bases por bolas a unos cuantos muchachos más, sí, pero también recortó casi dos carreras completas de su ERA mientras sentaba a más tipos gracias a los strikes. Claro, hay muchos factores que se suman para crear una línea estadística de rendimiento, pero parece que Gray tiene las cosas adecuadas para ser un lanzador abridor de primera línea. Es parcialmente una combinación de secuencia y entorno lo que lo está frenando.

Básicamente, estamos en un punto en el que Gray debería lanzar su bola rápida como un aperitivo, utilizar el envío con más velocidad como una ramita de romero en un delicioso gin fizz, por así decirlo. El problema que surge es que los mejores lanzamientos de Gray son menos efectivos en las condiciones ambientales de su estadio, lo que lo obliga a confiar más en la bola rápida, a la que tatúan fácilmente, lo cual…tú sabes…no es bueno.

Supongo que lo que estoy tratando de decir es que me gustaría ver a Jon Gray lanzar en algún lugar en el que pueda concentrarse por completo en lanzar lo mejor de su repertorio todo el tiempo, sin tener que preocuparse sobre cómo la altitud afectará a los lanzamientos específicos en condiciones específicas. Entonces, por favor, gerentes generales del béisbol, por la bondad de sus corazones, todo lo que quiero para Navidad es que uno de ustedes haga un intercambio por Jon Gray. Es mi único* deseo navideño.

(*No literalmente)

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