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Image credit: USA Today Sports

Traducido por Carlos José Lugo

Este artículo forma parte del lanzamiento de la nueva estadística ofensiva de Baseball Prospectus, Deserved Runs Created (Carreras Creadas Merecidas), de la cual usted puede conocer mucho más aquí.

Durante el verano, escribí un par de artículos comparando las tres métricas ofensivas modernas más conocidas: OPS+, de Baseball Reference, wRC+ de Fangraphs y nuestro TAv. Si aún no los ha leído y no se siente en ánimo de hacerlo ahora, la conclusión es que son bastante similares, pero que existen diferencias entre ellas.

Ahora que hemos dado a conocer nuestra métrica ofensiva de la próxima generación, Deserved Runs Created (DRC+), pensé que sería apropiado el desempolvar ese análisis. ¿Cómo se compara el DRC+ al OPS+ y wRC+?

Antes de empezar, pretendo que este sea un análisis de las (resulta ser que pequeñas) diferencias entre DRC+ y las otras dos mediciones. Si usted lo interpreta como una crítica al OPS+ o wRC+, es entonces porque no me estoy expresando bien. Baseball-Reference y Fangraphs son excelentes sitios web haciendo un excelente trabajo. Solo estoy tratando de explicar cómo nuestras métricas ofensivas varían.

Como hice anteriormente, eché un vistazo a cómo se compararon los jugadores que calificaron al título de bateo durante la era de 30 equipos, desde 1998 a la fecha. Les voy a mostrar gráficos de dispersión. En cada uno, la primera métrica mencionada está en el eje-x, la segunda en el eje-y. Y para cada uno, coloqué el coeficiente de correlación en el título. Repaso rápido de matemáticas: Mientras más cercana a 1.000 sea la correlación, más fuerte es la relación entre los dos números.

Empecemos con OPS+ y wRC+.

Un coeficiente de correlación de 0.992 es, como puede notar, muy, muy cercano a 1.000. OPS+ y wRC+ están casi perfectamente correlacionadas. Esto es interesante, puesto que las dos no miden realmente la misma cosa. El OPS+ de Baseball-Reference es el OPS ajustado a efectos de parque y contexto ofensivo de temporada. Mientras wRC+ de Fangraphs pondera los sencillos, dobles, triples, jonrones, bases por bolas no intencionales y pelotazos recibidos de forma separada. Aun así el resultado final es casi idéntico.

Vamos a movernos ahora a DRC+. Aquí, está la comparación con OPS+.

Muy bien, 0.935 es menos que 0.992, pero esa es todavía una correlación realmente alta. Aquí no encontramos ninguna separación radical. Ni tampoco la hay en la relación entre DRC+ y wRC+.

Bill James dijo en una ocasión, algo así como que (no pude encontrar la frase exacta) una estadística nueva debería en gran parte confirmar lo que ya sabemos pero al mismo tiempo impartir algún conocimiento nuevo. Coeficientes de correlación que son altos, pero no demasiado altos, son una indicación de esto.

Así que profundicemos en la nueva estadística. ¿Dónde están los valores atípicos, y qué podemos aprender de ellos?

Este es el gráfico de dispersión de DRC+ y el OPS+ de nuevo, pero esta vez con un par de valores atípicos resaltados.

El punto amarillo es Aramis Ramírez. En el 2010, Ramírez bateó .241/.294/.452 para los Cubs en 507 apariciones al plato. OPS+ lo vio como un año por debajo, asignándole un OPS+ de 95. DRC+ en cambio estuvo mucho más impresionado, dándole un 122. ¿Cuál es la razón de esta discrepancia?

En el 2010, aunque el Wrigley Field en general benefició a los bateadores diestros como Ramírez, DRC+ estima que mereció tener 12 sencillos y 10 dobles más de los que tuvo. Y esto está asumido por su BABIP. En el periodo 2007-2009, Ramírez tuvo BABIPs de .313, .303 y .331. En el periodo 2011-2013 estos fueron .308, .310 y .308. En el 2010: .245. Ramírez tuvo pésima suerte en el 2010. DRC+ reconoce dicha circunstancia y ajusta sus resultados hacia arriba.

El punto rojo es Brandon Nimmo, esta pasada temporada. Nimmo fue, bajo el criterio del OPS+, el mejor bateador de los Mets: .263/.404/.483. Esto le dio 150 de OPS+. DRC+ gusta igualmente de su temporada, pero con menos pasión: su DRC+ fue 119.

Una razón son los ajustes de parque o estadio. Baseball-Reference ve al Citi Field en el 2018 como un espacio mortal para los bateadores: un Factor de Parque de 90 por la temporada, es decir, reduciendo la producción de carreras en un 10 por ciento. Eso es mucho; esto significa que Nimmo tuvo que superar un sustancial viento en contra para generar su OPS de .886. DRC+ no ve al Citi Field de forma tan severa como el OPS+.

En adición a esto, Nimmo tuvo 28 dobles y ocho triples. Eso equivale a un impresionante 8.3 por ciento de sus turnos al bate comparados a un average de la liga del 5.4 por ciento. Pero Nimmo bateó solo un numero ligeramente sobre-promedio de pelotas hacia los jardines, y enfrentó lanzadores quienes generaron una proporción de rodados por encima del promedio. Usualmente usted no obtiene muchos extrabases de esa manera, así que DRC+ tiene sus sospechas. Un BABIP de .351 reafirma la opinión de DRC+ de que los números de Nimmo reflejan algo de buena fortuna, bajando sus calificaciones.

¿Qué tal una comparación con wRC+?

El punto Amarillo es Vinny Castilla en 1999. Castilla bateó .275/.331/.478. Esto fue en los días pre-humidificador del Coors Field, de modo que es relevante hacer notar que él bateó .280/.340/.511 en casa y .269/.321/.445 en la ruta. También es relevante apuntar que la Liga Nacional bateó .268/.342/.409 esa temporada, o sea que el OPS en la ruta de .766 de Castilla estuvo una pizca por debajo del average de la liga de .771. Su DRC+ es 113 comparado con un wRC+ de 78. La brecha de 35 puntos es la más grande, positiva o negativa, OPS+ o wRC+, comparada al DRC+ en las 21 temporadas mostradas aquí.

Como ustedes han de saber, wRC+ tiene una opinión muy poco favorable de los bateadores de los Rockies. En las 26 temporadas del equipo su más alto wRC+ ha sido 97, conseguido tanto en el 2007 como el 2014. En otras palabras, de acuerdo a wRC+, Colorado ha tenido una ofensiva por debajo del promedio en cada año de su existencia. (OPS+ coincide en su mayor parte, dándole a Colorado 102 en el 2014, 100 en 1997 y un score por debajo de 100 el resto de los demás años.) Tal como usted seguramente imagina, esto es en parte el resultado de un muy elevado ajuste de parque que arrastra hacia abajo los números de los bateadores de los Rockies.

Como mencionamos, Castilla estuvo por debajo de la media lejos de casa en 1999. Su OPS en la casa de .852 fue más bajo que el average del equipo de .932 – los Rockies batearon .325/.383/.549 en Coors Field ese año, algo así promedio como un equipo enteramente formado por Justin Turner del 2018 – pero obviamente bien por encima del pormedio de la liga. De modo que wRC+ le resta muchos meritos debido a su ofensivamente inflacionario estadio. DRC+, en contraste, observa su desempeño en la casa como consistente en aprovecharse de su entorno en la casa pero a la vez manteniéndose a flote por la misma razón. De acuerdo a wRC+, Castilla fue el decimotercer peor bateador entre los 157 que calificaron al título de bateo en 1999. Pero de acuerdo a DRC+, él ocupó el lugar 66, un jugador cuyos sencillos y dobles fueron suprimidos relativos a los que mereció.

El punto rojo es Luis Castillo de Florida en el 2000. Castillo terminó quinto en bateo de la liga ese año, con promedio de .334, y fue octavo en porcentaje de embasarse con .418. Pero además tuvo el decimotercer porcentaje de slugging más bajo, .388, entre 73 calificados, y, por un amplio margen, el más bajo poder aislado, .054. (El próximo más bajo fue el de Warren Morris de Pittsburgh, .083.)

Sus habilidades para embasarse – 158 sencillos, 78 bases por bolas en 626 apariciones al plato – le dieron un wRC+ de 119. Su falta de poder – 22 extrabases – le dieron en cambio un DRC+ de 89. Y usted probablemente puede adivinar porqué. Cuando conectas muchos sencillos, está beneficiándose de lo que Crash Davis describió como “una bengala extra, un rodado con ojos, una codorniz muerta.” Existe un elemento de suerte envuelto en conectar sencillos. DRC+ lo acredita con 120 sencillos merecidos, bien por debajo de su número real de 158. Eso reduce su promedio de bateo merecido a .272 y su porcentaje de embasarse merecido a .369. Esos ajustes representan la diferencia entre un bateador de sencillos ser 19 por ciento sobre-promedio a 11 por ciento bajo-promedio.

En general, DRC+ coincidirá con OPS+ y wRC+. Cuando no lo hace, será porque DRC+ mira hacia lo que el bateador merece haber producido, no a lo que produjo. Para ello se necesita una visión muy aguda de los factores de parque, distribución de los hits y, cuando lo amerite, el rol del “framing” de bolas y strikes.

Esta discusión engloba los 3,192 bateadores que durante las pasadas 21 campañas calificaron para el título de bateo. Para aquellos que estuvieron por debajo del límite de las 502 apariciones al plato, hay diferencias aún más grandes. Aquí estos dos ejemplos:

  • 1957 Bob Hazle: .403/.477/.649 en 155 apariciones al plato. 209 OPS+, 207 wRC+, 142 DRC+
  • 1969 Joe Rudi: .189/.220/.279 en 129 apariciones al plato. 42 OPS+, 39 wRC+, 68 DRC+

Hazle de 26 años entonces se ganó su apodo de “Huracán” por golpear pelota tras pelota luego de ser llamado a las Grandes Ligas a finales de julio, ayudando a los Braves a ganar apenas su segundo pennant desde 1914. Este solo aparecería en solo 63 partidos más en las mayores. Rudi tenía 22 años en 1969, y aunque lo hizo mal en breves estadías en 1967 y 1968 por igual, eventualmente llegaría a conseguir votos de MVP en cuatro temporadas como uno de los mejores jugadores de la dinastía de los Athletics a inicios de los años setentas.

Como pueden ver, a DRC+ le gusta mucho menos Hazle y Rudi mucho más, que las otras métricas. La clave, pienso, es lo que las métricas tratan de lograr. OPS+ y wRC+ nos están diciendo lo que pasó. En 1957, Hazle fue fenomenal. En 1969, Rudi apestó. DRC+ nos está diciendo cual fue la contribución más probable del jugador y lo que este mereció relativo a sus estadísticas crudas. DRC+ ve el OPS merecido por Hazle como un extraordinario .913, no el fuera-de-este-mundo 1.126, puesto que él mereció 13 hits menos que los 54 que recibió. Y ve el OPS merecido de Rudi como un pobre .591, no el incluso peor que de un pitcher .499, ya que mereció más sencillos, bases por bolas y dobles que los que recibió.

Y al mirarlos bajo esa luz, DRC+ es predictivo. ¿Era razonable esperar que Hazle continuara teniendo un OPS+ de 200-y tantos, o Rudi un wRC+ por debajo de 40? No, esas son probablemente variaciones fruto del tamaño de la muestra, difícilmente recurrentes. Para jugadores con apariciones al plato limitadas, DRC+ se encoge hacia la media. Las grandes variaciones para jugadores como Hazle en 1957 y Rudi en 1969 son una característica, no un error.

De nuevo, para bateadores que son regulares, las diferencias entre las tres mediciones son generalmente pequeñas. Este año, Khris Davis tuvo un OPS+ de 136, wRC+ de 135 y DRC+ de 135. En los pocos casos en donde las diferencias no son pequeñas, se explican por la diferencia en cómo DRC+ ve lo que el bateador merece. Para jugadores con menos apariciones al plato y desempeños extremos, DRC+ generalmente toma una visión más moderada de la probable contribución del jugador. Aprecio esas diferencias, y utilizaré DRC+ en mis análisis en lo adelante.

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