Traducido por Carlos Pérez
La semana pasada se dio a conocer que Major League Baseball había suspendido al gran prospecto Forrest Whitley por 50 partidos por violar el programa de drogas de las ligas menores. Eso es todo lo que voy a escribir sobre eso porque no va a evitar que se convierta en un verdadero número uno. Ya sea usted un aficionado a los Astros o un jugador de fantasía, no se asuste. ¿Por qué? Whitley puede ser el mejor prospecto en el juego y el equipo seguramente iba a limitar sus entradas de todas formas, después de lanzar 92.1 entradas el último año.
Es difícil estimar qué tan bueno es Whitley desde que fue drafteado con la selección 17 en el draft de 2016, desde el instituto. En aquel entonces, estaba considerado el típico diestro de preparatoria de Texas: un tipo grande (6’7’’) con una buena bola rápida y algo de intuición para su cambio de velocidad. Riley Pint, elegido en cuarto lugar ese mismo año, proyectaba una gran sombra sobre él. En estas páginas, destacamos al último sobre el primero. Sus caminos no podrían haberse diferenciado más de lo que están ahora.
No hay mucho que decir sobre el año del draft de Whitley. Los Astros le asignaron a la GCL para un par de aperturas y después a la Liga de los Apalaches para cuatro más. Naturalmente, el equipo fue (y todavía es) muy cauto con él, así que solo le dejaron lanzar 18 episodios. Aunque es difícil sacar conclusiones de una muestra tan pequeña, aprendimos que su bola rápida se encontró entre 93-95 y tocó 97, y añadió a su repertorio una buena bola curva inconsistente y un cambio de velocidad que parecía dominar, pero por el cual nunca tuvo gran repercusión.
Llega 2017. Comenzó con el equipo filial del medio oeste en categoría A. En 46.1 entradas, ponchó a 67 con un DRA de 3.63. “Ok, no está mal”, dijeron los Astros. Lo subieron a clase A Alta. En 31.1 entradas, registró un porcentaje de strikeout del 39 por ciento con un DRA de 2.14 y solo nueve bases por bolas. Y de postre, solo permitió tres carreras en 14.2 IP en Doble A con una ratio de 26 a 4 K/BB. Con todo, tuvo 14.0 K/9 en sus 92.1 episodios el último año con un ERA de 2.83 y un WHIP de 1.21. No quiero hablar solo de números aquí, especialmente en una muestra tan pequeña, pero es difícil no hacerlo cuando no he mencionado todavía lo mejor. Tenía 19 años.
Volvamos al segundo párrafo por un minuto. Whitley era un lanzador poderoso con una bola rápida tremenda, con algunas dudas sobre cómo sus lanzamientos secundarios se desarrollarían. Aquí está lo que tiene ahora: una bola rápida sobresaliente que se acomoda a mitad de las 90 con movimiento, un duro slider que se mueve lejos de los bateadores derechos, una buena curva que hace doblar rodillas, un cutter para quitarse de encima a los zurdos, y un cambio de velocidad que se está desarrollando por encima de la media. Eso es lo que Brett Phillips llamaría un Fregadero de Cocina. Después de verlo, Kate Morrison, miembro del equipo de prospectos de BP, se mostró impresionada por sus secuencias, una señal de madurez dada su edad. Batalló con bateadores desde atrás, “lo que sugiere que confía en todo su arsenal”, dijo Morrison.
Los riesgos con Whitley son desafortunadamente los que el Padre Tiempo puede aliviar. Recuerde que solo tiene 111 entradas profesionales en su hoja de servicio. Ha terminado la sexta entrada solo una vez, y eso vino con ocho días de descanso. Oficialmente pesa 240 libras, y ha perdido 20 o 30, así que uno solo puede esperar que eso no afecte su velocidad o aguante. En 2018, los Astros no estaban dispuestos a dejarlo volar, pero sí puede que le dejen lanzar 130 o 140 entradas. Incluso con la suspensión, eso es algo que debería ser capaz de completar. Pero los típicos riesgos porque “es un pitcher” permanecen y alguien cuya carga de trabajo no ha sido probada todavía, las preocupaciones por las lesiones siguen ahí.
En un contexto de fantasía, el potencial de Whitley todavía sigue al alza, lo cual es impresionante considerando que ya está en nuestro top 25 de nuestra Dinastía 101. Dado su creciente arsenal y sus secuencias avanzadas, no hay razón para pensar que no puede dominar Doble A y eventualmente Triple A. Con Brent Honeywell fuera hasta 2019 debido a una cirugía Tommy John, Whitley está en la batalla con Alex Reyes y Michael Kopech para el título de mejor prospecto de pitcheo en el béisbol. Con 20 años todavía hasta septiembre, hay una probabilidad de que debute más tarde esta temporada. Si no, apuesto que 2019 será el año que entre en la rotación de Houston. Si usted debe intercambiarlo, no lo haga hasta a finales de año. Por otro lado, si por alguna estúpida razón puede tener un diez por ciento de descuento debido a su suspensión, quíteselo de las manos a su propietario inmediatamente. No hay muchos ases de verdad en el béisbol. Whitley está en camino a convertirse uno de ellos.
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