keyboard_arrow_uptop
Image credit: USA Today Sports

Traducido por Martin Alonso  

Los Angeles Angels adquieren al 2B-D Ian Kinsler de los Detroit Tigers a cambio del LD Wilkel Hernandez y OF-I Troy Montgomery. [12/13]; Fichan al IF-D Zack Cozart a un contrato de tres años y $38 millones. [12/15]

Después de extender a Justin Upton y fichar a Shohei Ohtani, los Angels ya son los reyes de la temporada baja. Pero un nuevo pitcher no hace de uno un contendiente, y los Halos aún tenían huecos en dos posiciones del infield, así que el equipo mantuvo su naturaleza agresiva. Ahora, en lugar de introducir a Kaleb Cowart nuevamente en segunda base y apoyarse en la tanda de Luis Valbuena/Jefry Marte en la antesala, los Angels añadieron a dos veteranos de renombre para completar su infield y mantener su alza a contendiente legítimo de la post temporada.

El intercambio por Kinsler convierte a un viejo némesis en un nuevo amigo – durante sus años con los Rangers y Tigers, bateó .280/.360/.481 contra los Angels en casi lo equivalente a una temporada de apariciones al plato. Aunque ya no es la amenaza ofensiva de antes, aún es bastante bueno. La temporada pasada fue definitivamente un año turbio, ya que su Promedio Verdadero (.240) fue substancialmente menor al promedio de la liga (.260) por primera vez en su carrera. Kinsler aún bateó con un poco de poder, pero su BABIP y promedio de bateo cayeron de picada. Entrada a la temporada con 36 años, uno esperaría un rebote, pero es iluso esperar que tendrá otra gran temporada ofensiva a estas alturas de su carrera.

Cozart también es más viejo de lo que aparenta, y también un bateador con giros bastante sorprendentes a lo largo de su carrera. Después de trabajar con Barry Larkin – quien una vez le dijo, junto con otras cosas, que debía batear con más fuerza hacia la bola – la ofensiva de Cozart floreció. Antes un campo corto con buen guante y sin bate de aquellos de la vieja escuela, tuvo un espectacular 2017. Su Promedio Verdadero de .321 hubiera sido genial para el primera base o jardinero derecho de cualquier otro equipo, y lideró a todos los campo cortos de la MLB con 300 o más apariciones al plato, un punto por delante de Carlos Correa. Al otro lado de la bola, Cozart es un campo corto de reputación, al que se le pedirá moverse a tercera base porque, bueno, uno no puede descartar a Andrelton Simmons.

Combinando a estos dos como una mejora sobre Cowart, Valbuena, Marte, y los demás hace algo extraordinario: le otorga a los Angels buenos defensores en segunda y tercera base sin sacrificar ofensiva. Kinsler solía ser mejor con su guante, pero estos días sigue siendo estable y sólido. Cozart debería manejar la transición a tercera base tranquilamente, y entre sus manos y brazo, debería ser uno de los mejores defensores del juego en la antesala. Cuando se combinan con el incomparable talento de Simmons en la posición seis, los Angels pueden tener el mejor infield defensivo del béisbol, sin importar quién esté parado en primera base. Me quito el sombrero ante Los Angeles por encontrar una forma de mejorar su prevención de carreras sin mejorar sus brazos (todavía).

El único punto débil del equipo es el bateador designado (asumiendo que una tanda de Valbuena/C.J. Cron maneje la primera base), donde Albert Pujols era una sombra de sus años anteriores. Esta alineación también es un poco desbalanceada – solo Kole Calhoun, Valbuena, y Ohtani son bateadores zurdos – así que no lo daría por cerrado aún, pero es la clase de equipo que inundará de Miedo al oponente. Si incrementaron su presupuesto para mejorar estas posiciones, pero el contrato de Cozart parece favorable para el equipo, incluso si repite la mitad de su ofensiva del 2017. Mientras tanto, Kinsler será un agente libre después del 2018.

Aunque esto los lleva más cerca del límite del impuesto de lujo – y quizás los saqué de contención por los servicios de otros lanzadores de renombre además de Ohtani – mejora dos posiciones y hace de una debilidad (la defensa del infield) una ventaja. La temporada pasada los Angels cayeron de la carrera por el Comodín tarde, pero eso era con una estrategia de estrellas y reemplazos, una tendencia que empezó con pequeñas adquisiciones inteligentes la temporada pasada. Los Halos aún tienen un bullpen anónimo y una rotación con más signos de interrogación que la casaca del Acertijo, pero estas dos movidas los convierte en los favoritos para llevarse el segundo Comodín del 2018.

Si el dueño Arte Moreno está dispuesto de darle al gerente general Billy Eppler y compañía el dinero necesario para conseguir otro inicialista, me tendrán que alejar a la fuerza de una proyección de 88 o 90 victorias. Este equipo de los Angels ha comenzado a tomar forma a medida que sus estrellas son apoyadas con un sólido elenco. Cuando las estrellas son Mike Trout, Justin Upton, Andrelton Simmons, y ahora Shohei Ohtani, el cielo es el límite.

Thank you for reading

This is a free article. If you enjoyed it, consider subscribing to Baseball Prospectus. Subscriptions support ongoing public baseball research and analysis in an increasingly proprietary environment.

Subscribe now
You need to be logged in to comment. Login or Subscribe